School has wrapped itself up for another year here in El Salvador, and we are having the privilege of celebrating with three special young adults who have earned their high school diploma. Each with a special story. Each a star.

Chepe and Miguel graduated this past Saturday.

Gaby will be having her graduation ceremony soon.

Chepe proudly earned three awards for his efforts during his ceremony. We joked as we told him he looked like a general with his pins and awards hanging around his neck. It wasn’t necessarily easy when he moved from La Casa into our transition program two years ago. But with encouragement and sometimes a push, he stuck with his studies. He now wants to study business management of industrial companies.

Miguel, who lived with us for a season and then returned home to his family, invited us to celebrate with him at his graduation. For the past three years, Miguel has worked during the week and attended classes on Saturdays where he was given assignments for the upcoming week. He worked on those assignments after a long, hard day working and turned them in the following Saturday. And all that persistence, even when at times it would have been easier to quit, paid off. And that isn’t the end of Miguel’s aspirations. He has always loved art and has learned skills as a brick layer, so wants to combine the two and study drafting.

Gaby asked two years ago to have the opportunity to attend a school with much higher expectations. It was quite the task to make the jump and get use to a whole new way of learning for her last two years of high school, but Gaby persevered and kept trying and learning new ways to study. When she took the PAES, the national high school graduation test, she passed with a very solid score. We are proud of Gaby for not giving up. She desires to continue her studies and is considering a major in Physical Education.

Just like with each of us, a story is being written. We are grateful for each of their lives and for those who have partnered with us to make this day of graduating a reality. We are celebrating this victory and praying for each of them as they continue to reach for their hopes and dreams.

 

Celebrando los logros!

El año escolar ha finalizado aqui en El Salvador y estamos teniendo el privilegio de celebrar con tres jóvenes adultos especiales que han obtenido su diploma como Bachilleres . Cada uno con una historia especial. Cada uno una estrella.

Chepe y Miguel se graduaron el sábado pasado.

Gaby tendrá su ceremonia de graduación pronto.

Chepe orgullosamente ganó tres premios por sus esfuerzos durante su ceremonia. Bromeamos mientras le decíamos que parecía un general con sus pines y premios colgando alrededor de su cuello. No fue necesariamente fácil cuando se mudó de La Casa a nuestro Programa de Transición hace dos años. Pero con ánimo y a veces con un dificultades, perseveró con sus estudios. Ahora quiere estudiar gestión empresarial.

Miguel, que vivió con nosotros durante una temporada y luego volvió a casa con su familia, nos invitó a celebrar con él en su graduación. Durante los últimos tres años, Miguel ha trabajado durante la semana y asistido a clases los sábados donde se le asignaron tareas para la próxima semana. Trabajó en esas tareas después de un largo y duro día de trabajo y los entregó el sábado siguiente. Y toda esa persistencia, aun cuando a veces hubiera sido más fácil dejarlo, valió la pena. Y ese no es el fin de las aspiraciones de Miguel. Siempre le ha encantado el arte y ha aprendido habilidades como ayudante de construcción, así que quiere combinar los dos y estudiar dibujo.

Gaby pidió hace dos años tener la oportunidad de asistir a una escuela con expectativas mucho más altas. Era una tarea muy difícil hacer el salto y acostumbrarse a una nueva forma de aprender para sus dos últimos años de secundaria, pero Gaby perseveró y siguió intentando y aprendiendo nuevas maneras de estudiar. Cuando tomó la PAES, la prueba nacional de graduación de Bachillerato, ella pasó con una puntuación muy sólida. Estamos orgullosos de Gaby por no rendirse. Desea continuar sus estudios y está considerando estudiar Educación Física.

Al igual que con cada uno de nosotros, se está escribiendo una historia. Estamos agradecidos por cada una de sus vidas y por aquellos que se han asociado con nosotros para hacer de este día de graduación una realidad. Estamos celebrando esta victoria y orando por cada uno de ellos mientras continúan alcanzando sus esperanzas y sueños.

School has wrapped itself up for another year here in El Salvador, and we are having the privilege of celebrating with three special young adults who have earned their high school diploma. Each with a special story. Each a star.

Chepe and Miguel graduated this past Saturday.

Gaby will be having her graduation ceremony soon.

Chepe proudly earned three awards for his efforts during his ceremony. We joked as we told him he looked like a general with his pins and awards hanging around his neck. It wasn’t necessarily easy when he moved from La Casa into our transition program two years ago. But with encouragement and sometimes a push, he stuck with his studies. He now wants to study business management of industrial companies.

Miguel, who lived with us for a season and then returned home to his family, invited us to celebrate with him at his graduation. For the past three years, Miguel has worked during the week and attended classes on Saturdays where he was given assignments for the upcoming week. He worked on those assignments after a long, hard day working and turned them in the following Saturday. And all that persistence, even when at times it would have been easier to quit, paid off. And that isn’t the end of Miguel’s aspirations. He has always loved art and has learned skills as a brick layer, so wants to combine the two and study drafting.

Gaby asked two years ago to have the opportunity to attend a school with much higher expectations. It was quite the task to make the jump and get use to a whole new way of learning for her last two years of high school, but Gaby persevered and kept trying and learning new ways to study. When she took the PAES, the national high school graduation test, she passed with a very solid score. We are proud of Gaby for not giving up. She desires to continue her studies and is considering a major in Physical Education.

Just like with each of us, a story is being written. We are grateful for each of their lives and for those who have partnered with us to make this day of graduating a reality. We are celebrating this victory and praying for each of them as they continue to reach for their hopes and dreams.

 

Celebrando los logros!

El año escolar ha finalizado aqui en El Salvador y estamos teniendo el privilegio de celebrar con tres jóvenes adultos especiales que han obtenido su diploma como Bachilleres . Cada uno con una historia especial. Cada uno una estrella.

Chepe y Miguel se graduaron el sábado pasado.

Gaby tendrá su ceremonia de graduación pronto.

Chepe orgullosamente ganó tres premios por sus esfuerzos durante su ceremonia. Bromeamos mientras le decíamos que parecía un general con sus pines y premios colgando alrededor de su cuello. No fue necesariamente fácil cuando se mudó de La Casa a nuestro Programa de Transición hace dos años. Pero con ánimo y a veces con un dificultades, perseveró con sus estudios. Ahora quiere estudiar gestión empresarial.

Miguel, que vivió con nosotros durante una temporada y luego volvió a casa con su familia, nos invitó a celebrar con él en su graduación. Durante los últimos tres años, Miguel ha trabajado durante la semana y asistido a clases los sábados donde se le asignaron tareas para la próxima semana. Trabajó en esas tareas después de un largo y duro día de trabajo y los entregó el sábado siguiente. Y toda esa persistencia, aun cuando a veces hubiera sido más fácil dejarlo, valió la pena. Y ese no es el fin de las aspiraciones de Miguel. Siempre le ha encantado el arte y ha aprendido habilidades como ayudante de construcción, así que quiere combinar los dos y estudiar dibujo.

Gaby pidió hace dos años tener la oportunidad de asistir a una escuela con expectativas mucho más altas. Era una tarea muy difícil hacer el salto y acostumbrarse a una nueva forma de aprender para sus dos últimos años de secundaria, pero Gaby perseveró y siguió intentando y aprendiendo nuevas maneras de estudiar. Cuando tomó la PAES, la prueba nacional de graduación de Bachillerato, ella pasó con una puntuación muy sólida. Estamos orgullosos de Gaby por no rendirse. Desea continuar sus estudios y está considerando estudiar Educación Física.

Al igual que con cada uno de nosotros, se está escribiendo una historia. Estamos agradecidos por cada una de sus vidas y por aquellos que se han asociado con nosotros para hacer de este día de graduación una realidad. Estamos celebrando esta victoria y orando por cada uno de ellos mientras continúan alcanzando sus esperanzas y sueños.