Although there are public medical facilities here in El Salvador, medical care is not easy to obtain for those living in poverty. The need is far too great with limited services. Individuals may go and wait for hours and not be seen. They may be asked to return for tests, often given a return date of months later. Medicines may not be available, and if they can be found to purchase, they are too expensive for families to buy. This is the case for the families we serve.
We have been grateful for a group of medical professionals who volunteer their time each weekend at Nazareth Church who come twice a year to give our families medical care during our family visitation days. They take the time to listen, give professional advice and keep an eye on the health of our families. This is a huge blessing to our families, and we appreciate their partnership!
We hope you enjoy looking at a few pictures from their visit this past weekend.
Aunque en El Salvador contamos con atención médica pública, no es fácil ni accesible para muchos que viven en pobreza. La necesidad es superior a los servicios que se ofrecen. Las personas pueden esperar por horas y no ser atendidos, les piden que se hagan exámenes y pueden esperar meses por la siguiente cita. No hay medicamentos disponibles y cuando disponen de ellos, son demasiado costosos para poder comprarlos. Esta es la realidad de las familias que servimos.
Estamos muy agradecidos por un grupo de médicos profesionales que ofrecen voluntariamente su tiempo cada fin de semana en la iglesia de Nazaret y otros en sus clínicas y quienes nos apoyan dos veces al año para dar a nuestras familias la atención médica durante nuestros días de visita familiar. Se toman el tiempo para escuchar, dar asesoramiento profesional y chequear la salud de nuestras familias. Esta es una gran bendición para nuestras familias, agradecemos mucho su colaboración!
Esperamos que disfrute mirando unas fotos de la visita este fin de semana pasado.
